«A pesar de la difícil situación política y militar en el país, nuestras compañías de petróleo y gas están cumpliendo plenamente sus contratos con los socios iraquíes y planean desarrollar las relaciones a largo plazo», afrimó el diplomático.
Según el representante de la Embajada rusa, Moscú espera que en un futuro próximo comience la etapa comercial de un proyecto prometedor denominado Bloque 10, cuya implementación está a cargo de la compañía Lukoil.
«En una situación similar se encuentra la empresa Bashneft, que está desarrollando el campo petrolero Bloque 12. Pronto terminará la exploración de loa hidrocarburos, nuestros petroleros también comenzaron a preparar una declaración para la transición a la etapa de producción industrial de petróleo», agregó Lóbov.
Según el diplomático, en ocho meses de 2022 el intercambio comercial entre Rusia e Irak alcanzó los 313 millones de dólares, superando así las cifras logradas en todo el año 2021.
«El aumento considerable de las compras de nuestro aceite de girasol, así como del pienso para el ganado, fue un factor que influyó bastante en ese balance positivo», precisó Lóbov.
Para el representante de la Embajada rusa, por otra parte, las sanciones antirrusas repercutieron negativamente en el comercio con Irak, ante todo, en los pagos que se realizan en la esfera de la energía.