Fueron los primeros 29 kilómetros de la estación Tratayén. “La habilitación parcial y progresiva, procedimiento habitual en este tipo de operaciones, tiene por objetivo garantizar el llenado homogéneo del ducto con gas natural desplazando por completo el aire e involucra fases de barrido y presurización de las cañerías.
Además, permite probar el funcionamiento de los sistemas de medición y regulación de las plantas”, explicó Enarsa en un comunicado. La construcción del gasoducto se hizo en un tiempo casi récord. Los trabajos de suelo comenzaron en agosto de 2022 y ya está listo a 10 meses de iniciado. Luego de las primeras soldaduras en la traza, se avanzó con un promedio de 5 kilómetros diarios contando los tres frentes de obra. Así fue como se tendieron más de 47.700 caños de 12 metros de largo y de 36 pulgadas de diámetro, entre los 573 kilómetros de extensión del gasoducto entre Tratayén y Salliqueló, atravesando las provincias de Neuquén, Río Negro, La Pampa y Buenos Aires. El Gobierno emitió ayer distintos comunicados en relación a este proceso. Enarsa señaló que el gasoducto permitirá un “ahorro anual de US$ 4.200 millones por año en sustitución de importaciones de combustibles”.
La secretaría de Energía -encabezada por Flavia Royón- informó otros números sobre el impacto económico. “Esta primera etapa va a permitir un ahorro de US$ 1.700 millones. Y en 2024, que va a estar todo el año operativa, va a permitir un ahorro de US$ 4.000 millones”. Los ahorros parecen diferentes según quien los comunique. De todas formas, el beneficio sobre el fisco recién quedará más claro con el precio del GNL -el gas importado que sustituirá parcialmente- a lo largo del tiempo. Las estimaciones iniciales pueden no corresponderse con lo que suceda a futuro.
En 2022, el GNL estuvo a más de US$ 50 por millón de BTU en el invierno, mientras que ahora está a US$ 12. El gas local se paga a los productores cerca de US$ 4, mientras que las importaciones no bajan de US$ 8. Argentina destinó más de US$ 75.000 millones a importaciones energética en las últimas dos décadas, mientras posee Vaca Muerta, uno de los mayores reservorios de gas y petróleo del mundo.
La producción nacional genera empleos e impuestos que no se obtienen cuando se importa. “El país no va a necesitar importaciones de envergadura. Se va a poder comprar GNL (a través de barcos) para algunos picos de invierno, compras puntuales, pero no se va a necesitar de bloques de barcos importantes. (El ministro de Economía) Sergio Massa puso como prioridad la red de gasoductos”, agregó Royón en un comunicado. No hubo mención allí a Agustín Gerez, el titular de Enarsa, que logró construir el gasoducto en menos de 6 meses.