En el contexto de la desdolarización global, el desarrollo del comercio de petróleo entre los países árabes y China acelerar esa tendencia, opinan especialistas consultados por Sputnik.
China se ha convertido en uno de los principales socios de los Estados árabes y del golfo Pérsico, con muchos de ellos adoptando el comercio en yuanes.
El director del Instituto de Globalización y Modernización de China de la Universidad de Economía y Comercio Exterior china, Wang Zhimin, dijo a Sputnik que la expansión del uso del yuan para el comercio energético con los países de Oriente Medio es un proceso gradual y de largo plazo que requiere reformas graduales y libre elección del mercado.
Su comentario llega antes de las reuniones entre China, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, que se llevan a cabo del 10 al 13 de septiembre.
Sin embargo, Zhimin cree que, debido a sus relaciones con Estados Unidos, el proceso enfrentará obstáculos.
“En los últimos años, ha habido una clara tendencia de ‘desdolarización’ en Oriente Medio (…). El reciente interés de Arabia Saudita en usar el yuan para pagos de petróleo refleja nuevamente la tendencia creciente de diversificación del sistema monetario internacional”, dijo el experto.
La diversificación, de acuerdo con él, es una tendencia del desarrollo del mundo moderno, con la creciente posición china en el escenario mundial.
“En ese sentido, creo que cualquier país tendrá que adaptarse al desarrollo de la diversidad, pues es una tendencia inevitable y no puede ser interrumpida”, analizó.
El especialista del Centro de Tecnologías Políticas, Nikita Máslennikov, prevé un crecimiento gradual de la participación del yuan en las transacciones internacionales. Según él, hasta el final de la década, la participación de la moneda china podría llegar a 7% u 8%, a pesar de la presión de otras partes del mercado global.
Además, Arabia Saudita pretende participar en un sistema de pagos del BRICS que tarde o temprano será creado.
Obviamente, en Estados Unidos están preocupados con la creciente participación del yuan en el comercio internacional, pues eso significa el fin de la era del petrodólar.
En ese sentido, Washington está tratando de reducir artificialmente el alcance de la circulación de la divisa china, adoptando leyes inútiles, a decir de Máslennikov, que solo sirven para la política interna estadounidense.
La dinámica de la presencia de China en pagos internacionales será influida por la propia tasa de crecimiento de la economía del país asiático, así como su influencia en el mundo.
Hoy, por ejemplo, Pekín está respondiendo de forma flexible y positiva a las solicitudes de los países africanos y del sur de Asia para ayudarles a equilibrar sus presupuestos nacionales y estabilizar sus sistemas monetarios y financieros usando su moneda, lo que disminuye la importancia del dólar.