A día de hoy para el correcto funcionamiento de cualquier empresa es fundamental plantear un enfoque orientado hacia la Industria 4.0. La automatización, la Inteligencia Artificial o el Internet of Things son tecnologías simplemente esenciales, y ejemplo de ello es la industria de Alimentos y Bebidas. En este caso las nuevas tecnologías imponen el cambio en la fabricación para poder llegar a todos los clientes que marca la industria.
En esta industria ya son muchas las empresas que introducen equipos en la planta con tal de ofrecer un nivel de producción y mejores datos. Además, hay que tener en cuenta que en la actualidad, con la demanda existente y la importancia de tener sistemas independientes entre sí a nivel industrial, la industria 4.0 permite a las empresas dejar de ser reactores para pasar a ser pronosticadores.
Siguiendo con el ejemplo de la industria de Alimentos y Bebidas, encontramos una industria que se enfrenta a una recopilación de datos descomunal, por lo que las facilidades que trae consigo la industria 4.0 es vital para poder responder a todos ellos. Además de que permite la capacidad de proporcionar datos de primera mano rastrando las preferencias de los clientes antes del envío de sus productos gracias a la compra en línea.
Es en este momento cuando entramos en las infinitas posibilidades que ofrece Internet Of Things, donde se optimizan los procesos industriales al igual que optimizan el rendimiento de la planta industrial. De tal modo minimizan el desperdicio, el uso de energía y los costes de mano de obra, sumado a un aumento del rendimiento de producción.
Los desafíos de implantar la industria 4.0
Tras una entrevista realizada por McKinsey el dato es que tan solo el 48% de los fabricantes están listos para la revolución industrial. Los problemas para ello son:
- Notable inversión en empleados y nuevos equipos.
- Los fabricantes no se atreven a reemplazar a su equipo.
- Escasez de profesionales en el sector.
- La tecnología no resuelve los problemas de base humana, por lo que si se confía demasiado se crea una sobredosis de información.
- De no ajustar la producción a la demanda, se crea una sobreproducción.
- Considerar todos los datos de Internet of Things para saber las necesidades de los clientes.