A pesar de la pandemia, hay desafíos apasionantes que enfrenta la humanidad, entre ellos la denominada “Cuarta Revolución Industrial” o “Industria 4.0”, un proceso que se arraiga en tecnologías como la robótica, la inteligencia artificial (IA), la nanotecnología, Internet de las cosas (IoT), entre otros avances del conocimiento humano que están transformando la vida.
La presente nota no pretende explicar semejante proceso, pero sí mencionar algunos puntos salientes de él, ya que, quienes no estén al tanto de lo que está sucediendo, ya sean empresas o individuos, corren el riesgo de ser superados por acontecimientos difíciles de detener.
Importancia de tomar conciencia
El origen etimológico del término “revolución” viene del latín revolutum que puede traducirse como “dar vueltas”. Aplicado al transcurrir humano esto indica giro completo o transformación radical respecto al pasado inmediato, que afecta la situación social, económica y cultural, entre otras cosas. Los cambios revolucionarios tienen consecuencias trascendentales y suelen percibirse como súbitos y hasta violentos, ya que se trata de una ruptura del orden establecido.
Las revoluciones nacen como consecuencia de procesos históricos en los que el individuo (intelectuales) suele tener un rol primordial y la participación colectiva un papel decisivo. Por eso entender el potencial de la revolución en curso es fundamental ya que afectará diversos procesos cuyo alcance llegará a todos.
La industria 4.0 mejorará las operaciones de los negocios, transformará los productos y los procesos para fabricarlos, la logística, las expectativas de los clientes y proveedores (todos somos lo uno y lo otro a la vez) y la manera en que los seres humanos hacemos las cosas e interactuamos con nuestros semejantes y las organizaciones.
Como no podía ser de otra manera, esta revolución está presente en la aviación desde la fabricación y el mantenimiento de las aeronaves, hasta el control del espacio aéreo y el vuelo.
Uno de los ejemplos de cómo esta revolución se incorpora al medio aeronáutico es SKYWISE, una plataforma de datos abiertos de Airbus para la industria de la aviación, que tiene por objeto que la información correcta y necesaria esté disponible para los usuarios en el momento adecuado.
En la aviación, los datos solían estar encerrados en silos para mantenimiento, gestión de vuelo, monitoreo y seguridad de aeronaves, y otros flujos de trabajo críticos. Con SKYWISE se integran fuentes de datos dispares, lo que permite que la información se pueda compartir, sea abierta y transparente para que, de esa forma, se pueda comparar gran cantidad de información de diferentes fuentes, analizar datos identificando patrones para ayudar a encontrar las causas de problemas e implementar posibles soluciones, lo cual baja costos. SKYWISE simplifica el acceso a la información gracias a aplicaciones y paneles de control dinámicos y personalizados, lo cual permite la toma de decisiones más rápido y con mayor precisión.
Del mismo modo que lo hace Airbus, la mayoría de las industrias están concentradas en las nuevas tecnologías y, aunque en la aviación eso ha ocurrido así desde sus comienzos mismos, es importante saber que ésto, como se ha dicho, afectará a todos de una u otra manera.
Lo bueno de lo que se está instalando es que la Cuarta Revolución Industrial permitirá algo más que una mejor manera de hacer aeronaves y componentes, ya que también aumentará los niveles de seguridad operacional de las aeronaves, impactando desde las reglas básicas de vuelo VFR de la vieja Aviación 1.0, al incorporarse sistemas ciberfísicos para facilitar el trabajo humano tantas veces extenuante y riesgoso en materia de decisiones, incorporando inteligencia artificial (IA) y autonomía al vuelo.
En las fábricas y en los cockpits
En los procesos de manufactura de aeronaves y componentes aeronáuticos la incorporación de robótica, la fabricación aditiva, la realidad aumentada, la Internet de las cosas (IoT) y la simulación ya son rutina.
Así como podemos establecer cuatro etapas en la revolución industrial, podemos establecer cuatro etapas en la evolución de la aviación. La Aviación 1.0 fue la dominada por el vuelo VFR, con señales visuales y dominada por cómo construir y volar una aeronave. La 2.0, por el vuelos IFR, señales de radio y análogas, el desafío que signó esa época fue cómo volar un avión en condiciones adversas y controlar un creciente tránsito de aeronaves simultáneamente en el mismo espacio aéreo. A esa época le sucedió la de los sistemas y redes con equipos digitales en la que se multiplicó la información para una mejor y más rápida toma de decisión.
En la etapa que ya se está transitando, la Aviación 4.0, se puede observar un creciente nivel de automatización a bordo de las aeronaves. Aunque podría decirse que el camino recién empieza, todos, se quiera admitir o no, tienen en mente una cierta angustia respecto del avión totalmente automatizado, pero tranquilos, hay aspectos culturales que es posible alejen la probabilidad de que los aviones no tengan al menos un piloto “al mando” si a bordo viajan personas.