La producción de shale gas también se incrementó el año pasado y al igual que lo que sucedió con el petróleo, el desarrollo de 6 bloques representó el 76% de la producción total. En este caso fueron áreas operadas por 4 empresas: Tecpetrol, YPF, TotalEnergies y Pan American Energy.
Se trata de los bloques Fortín de Piedra, Aguada Pichana Este, La Calera, Rincón del Mangrullo, El Orejano y Aguada Pichana Oeste.
El bloque mayor producción registró el año pasado fue claramente Fortín de Piedra, de Tecpetrol, que representó el 34% del total. En segundo puesto se ubicó Aguada Pichana Oeste, operado por TotalEnergies, junto con otras empresas, que representó el 11% del total.
En términos porcentuales, el tercer puesto lo compartieron La Calera de Pluspetrol e YPF y Rincón del Mangrullo, de YPF, con 9% cada uno. Los últimos dos puestos fueron para El Orejano de YPF (7%) y Aguada Pichana Oeste de Pan American Energy, y otras empresas, con el 6%.
Esto representa el 76% de la producción de shale oil y deja un 24% restante que fue aportado por otros bloques de la formación.
El incremento de la producción de gas de Vaca Muerta estuvo directamente vinculado a la puesta en marcha del programa nacional de subsidios a la producción, el Plan Gas.Ar, que fijó contratos de venta a cuatro años a un precio sensiblemente mayor al que regía hasta ese momento.