Debido a las altas temperaturas que vive la zona, la UTE exporta el exceso de agua a la orilla cercana. El Ministerio de Industria argentino decidió aumentar la tasa promedio diaria de importación desde Bolivia, Chile, Brasil y Uruguay.
En medio de la fuerte sequía que golpeó al país, Uruguay importó energía eléctrica barata desde Brasil un año atrás para disminuir los gastos de generación térmica y conservar el agua.
Este verano presenta unas perspectivas mucho más prometedoras para la construcción de represas hidroeléctricas.
En el contexto de una ola de calor, Uruguay está abasteciendo íntegramente sus necesidades de generación local de electricidad, y además tiene excedentes de energía que están regresando a la zona.
Fuentes del mercado eléctrico informaron que el sistema eléctrico argentino experimentó un pico de demanda durante la jornada del jueves debido a la ola de calor, lo que recurrió a la importación de energía uruguaya, la cual se comercializó a US$ 80 MWh.
El jueves pasado en horas de tarde, el sistema eléctrico argentino logró un récord de potencia de 29.601 MW, según los datos de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) de Argentina.
Los alzas de carga causaron cortes de energía en la capital y la provincia de Buenos Aires. Además, 42 mil usuarios de Edesur y alrededor de 17 mil usuarios de Edenor se quedaron sin electricidad cuando la temperatura se acercó a los 38 grados centígrados en Buenos Aires y a los 39 grados centígrados en el área metropolitana, según Metsul.
Enel Américas podría cancelar su reunión con Milei antes de su salida de Argentina.
Para completar la generación, el Ministerio de Energía decidió incrementar las importaciones promedio diarias de electricidad desde Brasil a 1.529 MW, Uruguay a 177 MW, Bolivia a 100 MW y Chile a 80 MW.
“Estas medidas buscan mitigar un sistema que hoy está saturado y al borde del colapso, producto de años de falta de inversión y tarifas congeladas”, según dice una comunicación oficial.
Actualmente, Uruguay ofrece bloques de energía en Argentina y Brasil de manera diaria, que dichas naciones aceptan o no, según resultado esencial para mejorar sus sistemas en emergencia.
En su función de comercializador, UTE realiza estas ofertas, mientras que la Administración del Mercado Eléctrico (ADME) determina el precio mínimo que se acepta por cada bloque de energía.
En función de las necesidades que tenga para finalizar el abastecimiento de sus sistemas dado las altas temperaturas, una fuente consultada dijo que «es probable» que Argentina siga comprando estos días. Actualmente Uruguay experimenta días extremos con fuertes vientos, y esto también se debe a los altos niveles de agua en las lagunas.