La minería del litio en Argentina sigue consolidándose como un pilar estratégico para la economía del país, con proyecciones de crecimiento que reflejan tanto un incremento en la producción del mineral como un aumento considerable en la demanda de insumos químicos esenciales para su extracción y procesamiento.
En este contexto, el informe Demanda de insumos químicos en minería de litio de Argentina, elaborado por la Cámara de la Industria Química y Petroquímica (CIQyP®) y la Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), detalla dos escenarios que ilustran cómo se perfila el panorama de la minería del litio en el país, los insumos necesarios y los retos logísticos que se presentarán en el futuro cercano.
El análisis presenta dos escenarios de producción para la industria minera de litio en el país, cada uno con distintos horizontes temporales y niveles de capacidad productiva.
Escenario 1: Mediano plazo (hasta 2026)
Este escenario se enfoca en los proyectos de litio que ya están en construcción a principios de 2024. Con la entrada en operación de estos proyectos, se espera que la capacidad productiva de litio en el país aumente de 158.500 toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE) a 226.500 toneladas LCE para el año 2026. Esta expansión, según las estimaciones del informe, generará un incremento significativo en la demanda de insumos clave para la minería del litio, tales como:
- Soda ash (carbonato de sodio): La demanda se incrementaría a 453 mil toneladas, lo que representa un aumento del 181% respecto a la capacidad actual de producción.
- Cal (CaO): Se proyecta un aumento del 21% en la demanda, alcanzando las 504 mil toneladas.
- Ácido clorhídrico (HCl): La demanda de este insumo se incrementaría en un 40%, alcanzando las 170 mil toneladas.
- Dióxido de carbono (CO): Se proyecta una demanda de 200 mil toneladas.
- Soda cáustica (NaOH): Aumentaría a 102 mil toneladas, con la posibilidad de cubrirse con la capacidad instalada, aunque podrían requerirse nuevas inversiones.
Escenario 2: Largo plazo (después de 2026)
Este segundo escenario incluye tanto los proyectos en construcción contemplados en el Escenario 1 como aquellos que ya están planificados para su futura puesta en marcha. Con una capacidad productiva proyectada de 465.800 toneladas LCE, este escenario refleja un crecimiento aún más vertiginoso en la industria minera de litio, lo que incrementará la demanda de insumos químicos de forma significativa:
- Soda ash: La demanda crecería a 932 mil toneladas, más de 3.7 veces la capacidad productiva actual, lo que requerirá nuevas inversiones.
- Cal: Aumentaría a 1.036 mil toneladas, cubriendo el 43% de la capacidad instalada actual en San Juan.
- Ácido clorhídrico: La demanda alcanzaría las 349 mil toneladas, lo que representa un aumento del 80% respecto a la capacidad actual.
- Dióxido de carbono: La demanda se incrementaría a 403 mil toneladas.
- Soda cáustica: La demanda aumentaría a 112 mil toneladas, con un incremento del 29% que podría cubrirse mayormente con la capacidad instalada.
Desafíos y oportunidades para la industria química
El informe subraya que la minería de litio es una industria intensiva en el uso de insumos químicos, los cuales representan alrededor del 48% de los costos de producción del carbonato de litio, según datos de S&P Capital IQ. Esta alta dependencia de los insumos químicos coloca a la industria química y petroquímica argentina en una posición clave para asegurar la competitividad de la minería de litio.
El análisis resalta la necesidad de fortalecer la infraestructura local para abastecer la creciente demanda de estos productos, con énfasis en la producción de soda ash y ácido clorhídrico, cuya capacidad nacional de producción no satisface actualmente la demanda interna. Además, la calidad y competitividad de los insumos locales serán factores determinantes para mantener los estándares de pureza requeridos en la producción de litio y garantizar la sostenibilidad del sector.
En este sentido, tanto la CIQyP® como la CAEM coinciden en que la colaboración entre la industria química y la minería será esencial para optimizar el suministro de insumos y fomentar el desarrollo económico sostenible en Argentina.
Alejandra Cardona, directora ejecutiva de CAEM, señaló que “el crecimiento de la industria minera del litio es una gran oportunidad para Argentina, y el sector químico tiene un rol fundamental en este proceso”.
En tanto, Jorge de Zavaleta, director ejecutivo de CIQyP®, destacó que la industria química está estratégicamente posicionada para abastecer la demanda de insumos, y la colaboración entre ambos sectores será esencial para asegurar el éxito del sector minero de litio.
Métodos de extracción de litio
El informe también aborda los métodos utilizados para la extracción de litio, destacando las diferencias entre el método tradicional por evaporación y los más recientes métodos de extracción directa (DLE).
- Método tradicional por evaporación: A pesar de ser el más utilizado en la actualidad, este proceso depende de las condiciones climáticas, es lento y puede tardar entre 12 y 18 meses. Además, no es aplicable a salmueras diluidas, lo que limita su eficacia en ciertos yacimientos.
- Métodos de extracción directa (DLE): Estas tecnologías más avanzadas permiten separar el litio de la salmuera de manera más eficiente y rápida, reduciendo significativamente el tiempo de procesamiento, eliminando las grandes piletas de evaporación y disminuyendo el consumo de agua. A pesar de ser tecnologías más recientes, los métodos DLE representan una oportunidad para reducir el impacto ambiental y mejorar la competitividad de la minería de litio en Argentina.
Proyección del mercado global y desafíos logísticos
Con una producción de litio que continúa creciendo, Argentina se ha posicionado como el cuarto productor mundial del mineral. En 2023, la producción alcanzó las 45.94 mil toneladas LCE, y en el primer semestre de 2024, se superaron las 31 mil toneladas, un incremento del 63% respecto al mismo período de 2023.
Sin embargo, el crecimiento de la minería de litio no está exento de desafíos. El informe enfatiza la importancia de contar con infraestructura logística eficiente para el transporte de los insumos químicos a las zonas mineras, especialmente en el norte de Argentina, una región clave para la extracción de litio.
El documento, realizado con la colaboración de TAGING, una empresa argentina dedicada a la mejora de procesos en la minería del litio, plantea un futuro prometedor para la industria minera y química argentina. A medida que el país continúa ampliando su capacidad productiva de litio, se prevé una mayor integración entre los sectores minero y químico, lo que podría generar nuevas oportunidades de negocio y empleo local.