El año pasado fue uno de los mejores de la industria petrolera en las últimas décadas con subas de producción de la mano de Vaca Muerta que nos ponen a las puertas de tocar el récord histórico. Ya con todos los números oficiales sobre la mesa, se puede hacer un balance detallado para entender mejor la evolución del sector.
En petróleo se avanzó un 9,9% interanual para llegar a una producción promedio de 716 mil barriles diarios (aunque en diciembre se acercó a 780 mil): el 26% de ese volumen se destinó a la exportación y el resto al mercado interno.
Cuencas
Lógicamente, la locomotora de este boom fue el shale neuquino con un salto del 27% que pudo revertir la caída de todas las otras cuencas. El convencional neuquino cayó un 4,9%, la cuenca del Golfo San Jorge un 5,3%, la Cuyana un 6,2%, la Austral un 5,9% y la del NOA un 24,8%.
En cuanto al ranking de empresas del año bajo el criterio de propietarias (y no operadoras), YPF está en primer lugar con 258 mil barriles, PAE le sigue con 100 mil, Vista completa el podio con 68 mil, Chevron está cuarta con 50 mil, Shell llega a 45 mil, Petronas a 33 mil, CGC a 22 mil, Pluspetrol a 19 mil, Equinor a 16 mil y Phoenix a 13 mil.
De todas estas, la que más creció en relación al 2023 fue Phoenix (61%), luego Equinor (37%), Vista (32%), Shell (20%), Petronas (18%), y Pluspetrol y Chevron igualan con un 16%.
Bloques de petróleo
Por su parte, los principales bloques productivos fueron Loma Campana con 83 mil barriles (repartidos entre YPF y Chevron), La Amarga Chica con 66 mil (propiedad de YPF y Petronas), Bajada del Palo con 55 mil (100% de Vista), Bandurria Sur con 48 mil (repartidos entre YPF, Shell y Equinor), Cruz de Lorena con 15 mil (de Shell en un 90%) y La Calera con 14 mil (de Pluspetrol e YPF).
Por otro lado, el nivel de actividad mostró una situación estable en cantidad de pozos terminados por mes (solo uno más que en 2023), una caída en plataformas de perforación activas (de 47 por mes el año pasado a 37 este) y un salto en pozos enganchados de shale oil de 20 a 27.

La industria hidrocarburífera tuvo un 2024 a puro récord.
Bloques de gas
Respecto a la ventana de gas, se volvió a un fuerte crecimiento del 5,1% luego de un 2023 de caída, nuevamente con Vaca Muerta como motor al subir un 14,2%. Al igual que en petróleo, todas las otras cuencas de gas mostraron caídas. La convencional neuquina bajó un 9,1%, la del Golfo San Jorge un 5,5%, la Austral un 5%, la Cuyana un 15,5% y la del NOA un 5,4%.
En este caso, las principales productoras fueron YPF 39,7 MMm3d, PAE (18,4), Tecpetrol (17,3), Total (14), Pampa (11,5), Harbour (9,4), CGC (6,2), Pluspetrol (4,9) y Chevron (1,9). En términos de suba porcentual contra 2023, la más dinámica del año fue Chevron (34,3%), seguida de Pluspetrol (26,7%), Pampa (18,7%) y Total (8,2%).
Los mejores bloques de esta ventana fueron el histórico Fortín de Piedra de Tecpetrol (15,6 MMm3d), Aguada Pichana Este con 10,8 MMm3d (compartido por Total, Harbour, YPF y PAE), Aguada Pichana Oeste con 8,1 (repartido entre PAE, YPF y Total) y La Calera con 7,1 (de Pluspetrol e YPF).
En términos de actividad, se vio un panorama muy estable con una leve baja de pozos terminados (de 12 a 10), una suba pequeña de plataformas de perforación activas (de 11 a 12) y una caída mínima de pozos enganchados de shale (de 11 a 10).