Tras cerrar una transacción por US$ 6.700 millones, la minera anglo australiana Rio Tinto completó la adquisición de la estadounidense Arcadium Lithium una vez que las autoridades regulatorias de los países donde operan ambas compañías dieron el visto bueno a la operación. Se convirtió, así en la segunda empresa minera más grande del mundo. Su nombre es Rio Tinto Lithium y, en la Argentina, va a pasar a operar dos de los seis proyectos de litio que existen en producción.
Como otros proyectos mineros que demandan grandes inversiones, esta minera fue una de las que se presentó ante el Ministerio de Economía para lograr su adhesión al Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) ya que, en diciembre, planteó su objetivo de invertir US$2.500 millones para ampliar su planta, Rincón Litio, en Salta.
De acuerdo con los planes de la compañía, a mediados de este año, con esa inyección de fondos alcanzaría a tener en producción tres proyectos de litio para exportar: Rincón; el proyecto Fénix, en Catamarca, y Salar de Olaroz, en Jujuy, que tenía bajo su cartera Arcadium.
Rio Tinto Lithium tiene como objetivo aumentar la capacidad de sus activos desde 1 a más de 200 mil toneladas por año de carbonato de litio equivalente (LCE) para 2028. Aunque los precios internacionales del litio registraron una baja en los últimos tiempos, las tecnologías y geografías complementarias ofrecen un valor atractivo impulsado por el crecimiento acelerado del volumen en un mercado en alza. Asi, proyecta un EBITDA y un flujo de caja operativo significativamente más altos en los próximos años.
Además, de sus yacimientos de litio, Rio Tinto tiene inversiones en el cobre de San Juan a través de su empresa de tecnología Nuton con participación en los proyectos Los Azules y Altar.
Tras el cierre de la transacción, el director ejecutivo de Rio Tinto, Jakob Stausholm, sostuvo: «estamos encantados de dar la bienvenida a Rio Tinto a los empleados de Arcadium. Juntos, estamos acelerando nuestros esfuerzos para obtener, extraer y producir los minerales necesarios para la transición energética», señaló.
«Al combinar la escala, la solidez financiera y la experiencia operativa y de desarrollo de proyectos de Rio Tinto con los activos de primer nivel y las capacidades técnicas y comerciales de Arcadium, estamos creando un negocio de litio de primera clase que se suma a nuestras operaciones líderes de mineral de hierro, aluminio y cobre», afirmó Stausholm.
«Creemos que estamos bien posicionados para suministrar los materiales necesarios para la transición energética», dijo.