La Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) ha realizado un exhaustivo estudio titulado Global EV Outlook 2025 (Perspectivas globales de vehículos eléctricos 2025) en el que afirma que las ventas de coches eléctricos siguen batiendo récords a nivel mundial, especialmente en China y otras economías emergentes.
En 2025, se vendieron más de 17 millones de coches eléctricos en todo el mundo, alcanzando una cuota de mercado de más del 20%. Son 3,5 millones de vehículos más que en 2023.
China es el país que tira del carro, con más de 11 millones de eléctricos vendidos el año pasado, superando así las ventas mundiales tan sólo dos años antes. Como resultado del sólido y continuo crecimiento, uno de cada diez coches que circula por las carreteras chinas es eléctrico.
En Europa, las ventas de eléctricos se estancaron en 2024 a medida que se retiraban las ayudas públicas y otras políticas de estímulo, pero la cuota de mercado se mantuvo en torno al 20%, ya que el aumento de las matriculaciones en algunos países compensó las menores ventas en otros.
En Estados Unidos, las entregas de coches eléctricos crecieron alrededor de un 10% interanual, mientras mercados emergentes de Asia e Hispanoamérica se están convirtiendo en nuevos centros de crecimiento, con ventas que aumentaron más del 60% en 2024 a casi 600.000, aproximadamente el tamaño del mercado europeo hace cinco años.
Perspectivas de ventas de coches eléctricos para 2025
Según el informe, se espera que las ventas globales de automóviles eléctricos en 2025 superen los 20 millones, hasta representar más de una cuarta parte de las matriculaciones totales.
En el primer trimestre del año, las ventas aumentaron un 35% con respecto al mismo periodo de 2024, batiéndose récords en todos los mercados principales. Aunque esto se explica también porque el año pasado se produjo una desaceleración.
Si observamos por mercados, en China, las entregas de vehículos sin tubo de escape representaron alrededor del 60%, gracias a la continuación de los incentivos para reemplazar vehículos más antiguos y la caída de los precios.
En la Unión Europea y Reino Unido, los estándares de emisiones requerirán una mayor cuota de mercado de eléctricos. En el primer trimestre, se ha producido un crecimiento del 20% y se espera cerrar el año con un 25%, pese a la relajación de los objetivos de emisiones que la UE ha dado a los fabricantes de automóviles (normativa CAFE).
En cuanto a Estados Unidos, las perspectivas para 2025 son inciertas, debido a la orientación política actual, pero se espera que mantenga el crecimiento del 10% observado en el primer trimestre.
A medida que los consumidores aprovechen los créditos fiscales existentes ante su posible derogación, se prevé que las ventas de eléctricos alcancen el 11% durante el año. En las economías emergentes, salvo China, se espera que las ventas sigan creciendo con fuerza, aumentando un 50% hasta alcanzar el millón de unidades en 2025.
Previsión 2030: los coches eléctricos serán mayoría
A pesar de las incertidumbres en las previsiones, el estudio de IEA prevé que los coches eléctricos serán mayoría en 2030, superando el 40% de las ventas totales con la configuración de las políticas actuales.
Seguirá siendo China quien lidere las ventas hasta 2030, alcanzando una participación de alrededor del 80% gracias al importante impulso del mercado y a los modelos a precios competitivos.
En Europa, los objetivos de CO2 respaldan el logro de una participación de ventas cercana al 60% para 2030, ligeramente por debajo de la proyección del año pasado.
En Estados Unidos, el crecimiento será más moderado, alcanzando alrededor del 20% para 2030, siguiendo la dirección de las políticas actuales. Es menos de la mitad de la participación proyectada para 2030 el año pasado.
Mientras tanto, en el sudeste asiático, “las ventas de coches eléctricos se ven impulsadas por un fuerte apoyo político y la capacidad de fabricación nacional disponible: para 2030, se prevé que uno de cada cuatro coches vendidos en la región sea eléctrico”, recalca el informe.
Asimismo, el estudio señala que la implementación de vehículos eléctricos en todos los modos de transporte “reemplazará el uso de más de cinco millones de barriles de petróleo al día a nivel mundial en 2030. La mitad de estos ahorros se deben a la adopción de vehículos eléctricos en China”.
Los obstáculos que pueden frenar las previsiones
Siempre es difícil hacer pronósticos a medio o largo plazo. Si no, que se lo digan a los fabricantes de automóviles que anunciaron ambiciosos planes de electrificación y la mayoría han dado un paso atrás.
El informe apunta también que “la incertidumbre sobre la evolución de las políticas comerciales e industriales, los riesgos a la baja para las perspectivas económicas y la bajada de los precios del petróleo podrían afectar la adopción de vehículos eléctricos, pero también al mercado automovilístico en general”.
El aumento de los aranceles podría incrementar el precio de los vehículos, incluidos los eléctricos, y sus componentes. Al mismo tiempo, un menor crecimiento del PIB podría frenar las ventas y la bajada de los precios del petróleo afecta al ahorro en combustible derivado del uso de vehículos eléctricos.
No obstante, “si bien se desconoce cómo se manifestarán estos factores en la práctica, en conjunto parecen plantear riesgos para el volumen total de ventas de automóviles más que para la cuota de vehículos eléctricos”, añade.
Parece que China podrá resistir todos estos obstáculos, gracias al continuo apoyo político y los precios competitivos de sus vehículos eléctricos.
En Europa, “donde las diferencias de precio con los vehículos de combustión son mayores, la combinación de una ambición política a largo plazo y los ejemplos de respuestas políticas a la pandemia sugieren que es posible mantener las ventas de vehículos eléctricos”.
Por otro lado, un precio bajo del petróleo puede reducir el ahorro de combustible que ofrecen los vehículos eléctricos frente a los de combustión. Sin embargo, incluso con un barril a 40 dólares, “se producirían ahorros significativos en combustible en los principales mercados de vehículos eléctricos al cargarlos en casa”, estima el estudio.