El gobernador catamarqueño, Raúl Jalil, apoyó el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) y asegura que Catamarca va triplicar en 2025 la producción de litio de este año. Los votos que controla el mandatario en la Cámara de Diputados fueron claves para atornillar la sanción de la norma que impulsó el presidente Javier Milei y que usufructuarán las compañías de todo el mundo que ya operan en el distrito desde hace varios años.
Raúl Jalil y los socios en la política
El mandatario catamarqueño coronó una serie de acuerdos con la Casa Rosada el 9 de julio pasado cuando rubricó el Pacto de Mayo. Antes, había tejido pacientemente un ida y vuelta que se tradujo en los debates parlamentarios y también en la gestión ejecutiva. Si bien no tomó la decisión extrema que asumió el tucumano Osvaldo Jaldo cuando rompió el bloque de Unión por la Patria, la discusión de la ley ómnibus y el paquete fiscal dejó en claro que la dinámica de Jalil privilegiará los intereses provinciales. El RIGI fue uno de los puntos de confluencia, con la minería en primer puesto.
La aceitada relación con la Casa Rosada ya tuvo sus beneficios en un contexto en la que la mayoría de los gobernadores, sobre todo los peronistas, reclama el envío de fondos para continuar las obras que Milei paralizó casi por completo en todo el país.
Semanas atrás, el gobernador se reunió con Guillermo Francos y firmó un acuerdo por 25 mil millones de pesos que se utilizarán para obras de rutas, puentes y cloacas y otros 6.500 millones para la continuidad del Plan Integral de Viviendas.
Los socios del litio en Catamarca
Mientras Jalil garantiza el andamiaje político, en la provincia pionera en la extracción de litio hay capitales surtidos con proyectos millonarios. Catamarca comparte con Salta el Salar del Hombre Muerto, la salmuera de litio más concentrada de la Puna argentina. Allí Arcadium Lithium tiene el proyecto Sal de Vida con una inversión de u$s130 millones y el proyecto Fénix instalado en 1998. El megamillonario Elon Musk que admira Milei se abastece del litio de Arcadium para su fábrica Tesla. También la automotriz BMW compra litio catamarqueño. Tecpetrol, de Techint, tiene 5.000 hectáreas ahí.
El holding Integra Capital que comanda Manzano y su brazo litífero, Integra Lithium, va a explotar 243.000 hectáreas en salares en Catamarca. Diversificado y trasnacional, entre Catamarca y Jujuy el grupo informa que está desarrollando más de 400.000 hectáreas.
Proyecto Laguna Verde en el Salar de Antofalla está en etapa de exploración inicial, con capitales de la empresa china Znagge Mining y la canadiense Ultra Lithium. Permitirá producir 20.000 toneladas anuales de carbonato de litio durante 30 años.
La minera Mining Projects, de los Emiratos Árabes Unidos, invertirá u$s550 millones hasta 2028 para el proyecto de litio Río Grande, en el noroeste de Catamarca. Ocupan 700 puestos, de los cuales 200 son fijos. La estadounidense Albemarle explota litio en Chile y tiene en Catamarca la concesión para explorar la existencia de litio en el Salar de Antofalla.
El Proyecto Tres Quebradas (3Q) ubicado en Fiambalá a 30 kilómetros de la frontera con Chile. Está en construcción de la fase 2, para alcanzar una capacidad productiva de 30.000 toneladas anuales de carbonato de litio. Es una inversión del gigante asiático Zijin Mining Group, con una vida útil de 50 años.
La empresa surcoreana Posco Holdings anunció una inversión de u$s800 millones para comenzar a producir en 2025, también en el Salar del Hombre Muerto, de Antofagasta de la Sierra. Al mismo tiempo, anunció la construcción de una fábrica de baterías en Corea.
También en Catamarca está el proyecto Kachi, en el salar Carachi Pampa. La australiana Lake Resources presentó Impacto Ambiental y Social y un proyecto innovador de extracción que reduce el uso de agua dulce. Es una inversión de más de u$s1.300 millones y busca financiamiento para comenzar a producir en 2027.
“La explotación del litio nacional atrae capitales de muchos países, hay inversiones de EEUU, Australia, Corea, Francia, Japón, China. La inversión en litio no requiere de un instrumento como el RIGI, llega igual sin esos incentivos», le dijo a Letra P el exdiputado Roberto Salvarezza, presidente de la Comisión de Investigaciones Científicas bonaerense. La presencia extranjera en la actividad minera catamarqueña parece ratificar esa afirmación. Con todo, el RIGI amplía los márgenes de las corporaciones. El apoyo del gobernador a la sanción del régimen hizo el resto.