Noruega es el tercer mayor exportador de petróleo después de Arabia Saudí y Rusia pero, al igual que este último, está fuera de la OPEP. Su PIB per cápita está por el orden de los 80 mil dólares estadounidenses, exportaciones por el orden de los 80 mil millones de dólares e importaciones por el orden de los 49 mil millones. Su población activa se estima en 2,65 millones de personas y tiene lo que se llama cero pobreza.
Pero, ¿Qué hace Noruega con los beneficios del petróleo? Revierten directamente en la población. Ya sea a través del pago de los estudios universitarios, el fondo de pensiones, o un sistema de beneficios para garantizar el futuro de los más mayores, cuando consuman mayores recursos del país.
Desde el inició de la producción hasta 1996 no hubo un gran flujo de caja positivo y todos los impuestos recaudados fueron para financiar la participación oficial en la operación, que fue creciendo lentamente y, paralelamente, fueron desarrollando otras industrias conexas, como la industria de construir plataformas y otros elementos, la exportación de bienes y servicios al sector petrolero y otros sectores, que empezaron a tener un valor muy importante y evitó contraer la enfermedad holandesa.
Para iniciar su explotación petrolera se establecieron unos principios nacionales:
+ Garantizar el control nacional en todas las actividades en la plataforma continental de Noruega
+ Noruega debía ser independiente en el abastecimiento de petróleo crudo
+ Debía desarrollarse un nuevo sector industrial basado en el petróleo
+ El desarrollo debía tomar en consideración las actividades comerciales existentes y la protección del medio ambiente
+ El gas útil no debía quemarse
+ Los depósitos de petróleo en tierra serían en Noruega
+ El Estado debía contribuir a la construcción de un entorno integrado de petróleo en Noruega
+ Se debía establecer una empresa estatal
El súper impuesto del petróleo: beneficios para la población
Cuando el precio del petróleo subió en 1973 y luego otra vez en 1979, Noruega introdujo un súper impuesto para evitar que la mayor parte de la rentabilidad del aumento de los precios fuera a parar a las empresas. Las licencias se habían emitido con el petróleo a 1,9 dólares, pero el barril había subido a 12 dólares. Noruega tomó la decisión de aumentar su participación en el negocio, pasando a tener al menos el 51% de participación en cada proyecto, llegando a recaudar un total cercano al 80%, sumando el impuesto a la participación del Estado como accionista.
Los recursos del Fondo son invertidos en bonos, valores y acciones en el exterior, evitando que generen sobre evaluación de la moneda, inflación e impacto económico interno. Un máximo del 4% de los rendimientos son utilizados como recursos complementarios del Presupuesto Nacional, que cumple rigurosas y estrictas reglas, que evitan la inyección súbita de la renta petrolera en la circulación monetaria interna y un estricto control de los ingresos al presupuesto estatal, que limita al gobierno de turno para gastar discrecionalmente la renta petrolera y evitando los problemas derivados de la «enfermedad holandesa».
Sólo a raíz de la crisis económica mundial de 2016 y los bajos precios petroleros, se autorizó temporalmente un uso mayor al 4% de los rendimientos del Fondo.
El Banco Noruego de Inversiones (Bank Investment Management, NBIM) es responsable de asegurar el rendimiento de las inversiones y se asesora con las mejores firmas de inversión. Las inversiones van dirigidas hacia sectores de petróleo y gas, insumos básicos, industria, bienes de consumo, salud, farmacéutica, biotecnología, telecomunicaciones, servicios públicos (agua y electricidad), bancos, seguros, servicios financieros, tecnología (software y hardware).
El objetivo del Fondo
El Fondo es para que la riqueza petrolera asegure la calidad de vida de los pensionados y las futuras generaciones, las inversiones deben estar en armonía con el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente y la responsabilidad social.
Desde la creación del Fondo Petrolero, ahora Fondo de Pensiones Global, Noruega ha presentado un crecimiento estable y sostenido de su economía, con muy bajos índices de inflación, un fortalecimiento de los salarios y de las ganancias de las empresas. La rentabilidad de las inversiones ha aumentado, al igual que las acciones de las compañías en la bolsa de Oslo.