A pesar de los desafíos que la volatilidad de precios de los commodities representa para la valuación de los activos, de la perspectiva de demanda incierta y de las prohibiciones de viajes a nivel global que dificultan la ejecución de acuerdos, vislumbran un cierto resurgimiento del interés en la realización de fusiones y adquisiciones (M&A) en la industria de Energy, Utilities & Resources.
“Si bien la digitalización sigue siendo el motor disruptivo principal de la industria, la ‘desglobalización’ de las cadenas de suministros, la resiliencia ante la crisis producida por la pandemia y las desinversiones selectivas en activos de alto riesgo están ganando importancia en las agendas de la industria, debido a la interrupción que presenta actualmente la cadena de suministros y las disputas comerciales”, analiza Alejandro Rosa, socio de PwC Argentina.
Según la consultora, la complejidad y las consecuencias resultantes de una recuperación asimétrica del Covid-19, y el impacto económico provocado en empresas e industrias, son determinantes en las tendencias de M&A respecto al volumen, tipo, magnitud y ritmo de las transacciones dentro del sector, en el corto y mediano plazo. En los primeros seis meses del 2020, la cantidad de acuerdos ha tendido a disminuir para todos los subsectores, en particular, Petróleo y Gas, y Generación y Distribución de Energía Eléctrica.
Los valores de las transacciones también han tenido una tendencia a la baja, sobre todo en comparación con 2018, cuando se vieron impulsados por un número récord de mega deals (de los cuales casi la mitad fue en Generación y Distribución en Energía Eléctrica) que arrojaron un valor promedio general de US$ 288 millones. Estos valores están significativamente por encima del promedio para la primera mitad de 2020, que alcanzó los US$ 95 millones promedio por transacción. (…)