Plan Gas: Vaca Muerta atenta a los cambios

El Plan Gas.Ar permitió que las compañías pudieran duplicar su producción, pero sobre todo brindar previsibilidad a los proyectos en Vaca Muerta. El éxito de la iniciativa permite pensar en el futuro. Las operadoras siguen con atención los planes del Gobierno nacional para extender los llamados realizados a partir de 2020, y la convocatoria al Plan Gas.Ar V, que estará destinado a llenar el Gasoducto Néstor Kirchner.

Es un buen momento para tener previsibilidad”, sostuvo Rodolfo Freyrevicepresidente de Gas, Energía y Desarrollo Comercial de Pan American Energy (PAE) en el marco del webinar “La energía argentina a máxima potencia”, organizado por Ámbito Financiero.

Es que el Plan Gas.Ar brindó seguridad a las empresas, que durante mucho tiempo trabajaron con tiempos muy acotados. “Nosotros veníamos trabajando sin contratos y ahora tenemos horizontes de tiempo”, aseveró.

En la misma línea, Juan Manuel ArditoVP de Upstream No Convencional de YPF, consideró que el Plan Gas.Ar le permitió a la empresa de mayoría estatal duplicar su producción de gas y poner en valor la producción gasífera del país. “Nos ha dado buenas señales. A las compañías nos da previsibilidad y trabajar para que nuestros precios sean competitivos y beneficiosos para el país. Son cuestiones que la industria necesita y que se está avanzando por buen camino”, destacó.

GNL PARA EL FUTURO

Otro de los proyectos que necesita un marco regulatorio es el gas natural licuado (GNL). YPF firmó un acuerdo con Petronas para avanzar en un plan de exportación a largo plazo. Freyre manifestó que es necesario trabajar en políticas que permitan brindar previsibilidad a inversiones que necesitarán apoyo externo y generar las condiciones necesarias para sumar más actores.

“Limitarnos al consumo local o las exportaciones regionales es sabor a poco. Debemos estudiar y aprender sobre el GNL porque le dará un salto de calidad al volumen del gas natural en Argentina”, consideró el vicepresidente de Gas, Energía y Desarrollo Comercial de PAE y subrayó que “todos los productores de una forma u otra están analizando proyectos de GNL”.

Asimismo, Ardito ponderó que el contexto mundial ofrece una ventana temporal para disponer del recurso. “Es importante para monetizar los recursos gasíferos. Desde Vaca Muerta podemos aprovechar esa oportunidad y, una vez que logremos satisfacer la demanda interna, podemos comenzar a exportar”, afirmó.

EL GRAN CUELLO DE BOTELLA

Las compañías transitan un cierre de año marcado por la regularización de la actividad después de varios vaivenes establecidos por el COVID-19. La producción de Vaca Muerta rompe récords todos los meses, pero el gran cuello de botella continúa siendo la infraestructura.

Un ejemplo claro es lo que sucede en Aguada Pichana. PAE no puede acelerar sus trabajos en el área debido a que no tiene donde evacuar su producción. Es por eso que la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner será fundamental para los planes de las operadoras en el futuro.

“El área Aguada Pichana tiene un potencial enorme, pero no podemos crecer. Por eso el gasoducto es totalmente necesario porque permitirá que todos los operadores podamos seguir invirtiendo”, destacó Freyre.

La alternativa que maneja la compañía del Holding Bulgheroni es trabajar sobre el declino de otras cuencas para aprovechar la capacidad de la infraestructura. Esa será la tarea del proyecto Fénix donde se recuperarán los niveles de producción de la Cuenca Austral y se llevará gas natural a los hogares a través de los diferentes ductos.

En tanto, YPF apuesta sus cañones al transporte de crudo mediante los proyectos de Otasa y Oldelval lo que significará que pueda duplicar su producción. “Los proyectos de midstream ponen en valor que somos capaces de comercializar a precios muy competitivos”, aseveró Ardito.

En base a este objetivo, la empresa de mayoría estatal se enfoca en la perforación de pozos cada vez más eficientes. “Estamos yendo a laterales más largos. En Vaca Muerta tenemos el pozo más largo de 4400 metros de rama horizontal. En fractura estamos trabajando en más eficiencia de recursos”, describió.

“También demostramos que somos competitivos en el segmento de gas y que tenemos costos bajos. Los proyectos de midstream van a permitir seguir profundizando esos recursos”, agregó.

El tiempo es relativamente corto. Los hidrocarburos ofrecen una oportunidad única para el país, pero en una ventana que comienza a cerrarse lentamente. Es por eso que el objetivo es avanzar rápidamente, pero con pasos seguros. “Sin lugar a duda el gas natural tendrá un rol fundamental en la transición energética. Tenemos una oportunidad extraordinaria y si pensamos que los proyectos van a escalar hacia adelante, esa energía va a estar disponible para el mundo y con baja emisiones de carbono”, ponderó Ardito.

Cubrir la demanda interna para después exportar

Si se cumplen los plazos establecidos, la obra del Gasoducto Néstor Kirchner estaría lista para el próximo invierno. Esto generaría un alivio en las cuentas de Casa Rosada porque permitiría que las divisas destinadas a las importaciones de GNL sean netamente reducidas.

En este marco, Rodolfo Freyre, vicepresidente de Gas, Energía y Desarrollo Comercial de Pan American Energy (PAE), consideró que el país debe cubrir la demanda del mercado local para luego pensar en exportaciones.

Nuestro gran déficit está en las importaciones de GNL y de gas desde Bolivia. Nuestro objetivo debe fijarse en reemplazar esas importaciones para después profundizar las exportaciones regionales”, aseguró.

Asimismo, Freyre ponderó que el potencial de Vaca Muerta permitiera que se mantengan las exportaciones de gas durante todo el año. “Solo tuvimos cinco o seis días durante el invierno que no se pudo exportar gas natural, pero el resto del año se mantuvo ese flujo. Eso lo tenemos que seguir profundizando. Esperamos que en los próximos años podamos seguir haciéndolo”, aseveró.

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