El Gobierno argentino decidió apurar dos proyectos en el sistema transporte de gas para intentar suplir con producción de los yacimientos gasíferos de Vaca Muerta parte del gas boliviano que este año no estará disponible, según publica la agencia de noticias argentina EconoJournal.
El Gobierno argentino trabajará para revertir dos plantas compresoras en el Gasoducto Norte a fin de enviar hasta 4 MMm3/día de gas adicionales desde Neuquén hacia Salta a partir de junio.
Consultado al respecto, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen confirmó que hay negociaciones con Argentina y precisó que el proceso “no se cerró”.
“Están especulando con la información”, sostuvo.
Dorgathen consideró, además, que este tipo de noticias tienen objetivos “políticos” que le hacen daño al país y que no se debería “entorpecer las negociaciones”.
De acuerdo a la publicación, el Gobierno boliviano informó a su par argentino que está en condiciones de enviar “sólo 6 millones de metros cúbicos (MMm3/d) de gas” a ese mercado durante el invierno de 2023, 8 MMm3/día menos que lo establecido para el invierno de este año. La información, difundida en el vecino país, fue calificada como “especulación” por Dorgathen.
Debido a esta situación, “el área energética del Gobierno (rioplatense) está negociando con autoridades de Bolivia la firma de una nueva adenda al contrato de importación de gas” entre ambos países, informó la agencia de noticias EconoJournal, que para dar la información consultó con “fuentes públicas y privadas sin contacto entre sí”.
Ambos gobiernos “están negociando el precio y la cantidad, en invierno en particular, que es cuando Argentina necesita el gas”, afirmó Álvaro Ríos, ex ministro de Hidrocarburos de Bolivia.
“La Argentina está negociando y viendo la forma de readecuar el gasoducto que tiene con Bolivia para vender (gas) a Brasil”, acotó José Padilla, ex secretario de Hidrocaburos de Santa Cruz.
Ríos sostuvo que cada año la producción total de gas de Bolivia se reduce entre un 4,5 y 5%, por lo que se prevé que el próximo invierno, YPFB tendrá una oferta de entre 37 y 38 Mmm3/día, lo que deja entre 13 y 14 MMm3/día para el mercado interno, 17 MMm3/día para Brasil y de 6 a 7 MMm3/día para Argentina.
“Que pueda mandarle un poco menos a Brasil o que el mercado interno necesite un poco menos es otro tema, pero el balance de la estructura de producción de gas de Bolivia nos da eso”, aseveró.
“Todos los años se repite la misma historia. Tropezamos con la exportación en invierno y no cumplimos con las adendas”, sostuvo Padilla.
El contrato inicial suscrito entre ambos países establecía una entrega de 7 MMm3/día en 2007, hasta 16 MMm3/día en 2018 y 2019, 25,7 MMm3/día en 2020 y 27,7 MMm3/día entre 2021 y 2026. Sin embargo, las autoridades renegociaron los volúmenes originales definidos y los fueron reduciendo hasta llegar este año a 14 MMm3/día para invierno. “El contrato con Argentina y Brasil dice mucho de cómo estamos en reservas”, dijo Padilla.
Ríos consideró que la declinación en la producción de gas natural boliviano “va a continuar año a año” y que la situación “no tiende a mejorar. Por eso es que la Argentina y Bolivia ya han planteado que el contrato acabe a finales de 2024”, remarcó.
“No tenemos visos de aumentar reservas”, por lo que el gas disponible alcanza para “cinco o siete años máximo”, acotó Padilla.
Al momento, Argentina negocia con Bolivia la conclusión del contrato antes del 2026, ya que la segunda etapa del gasoducto Néstor Kirchner estará operable en el segundo semestre de 2024.
En tanto que Argentina apura sus proyectos. El gobierno de Fernández decidió apurar dos obras en el sistema transporte de gas para intentar suplir con producción de Vaca Muerta parte del gas boliviano que este año no estará disponible.
Está prácticamente decidido que el Ejecutivo incluirá dentro de la actualización de las tarifas de Transportadora Gas del Norte (TGN), que se debatirá en la audiencia pública del próximo 4 de enero, los fondos necesarios para revertir dos plantas compresoras en el Gasoducto Norte a fin de enviar hasta 4 MMm3/día de gas adicionales desde Neuquén hacia Salta a partir de junio de este año.
Eso significa que los trabajos se financiarán mediante la suba de las facturas de gas que entrará en vigencia el 1º de febrero, si se cumple con el cronograma previsto por el Ministerio de Economía.