La AIE ajustó al alza las proyecciones de crecimiento de la demanda de petróleo para el próximo año.
La demanda de petróleo para el conjunto de 2024 superará las proyecciones anteriores, a pesar de la desaceleración económica en la mayoría de las grandes economías, aunque su aumento será más moderado que en 2023, según las previsiones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) anunciadas este martes.
El informe destaca un equilibrio “vulnerable” en los mercados petrolíferos que se espera que sea “más volátil en el futuro”, debido a una demanda que sigue superando la oferta, especialmente cuando se acerca el invierno en el hemisferio norte, y persisten los “riesgos económicos y geopolíticos crecientes”.
A pesar de ello, se indica que, hasta el momento, la reactivación del conflicto en Oriente Medio no ha tenido impacto en el suministro.
En su informe mensual de noviembre, la organización afiliada a la OCDE estimó que la demanda de petróleo en 2023 alcanzará los 102 millones de barriles diarios, 2.4 millones más de lo pronosticado anteriormente.
Esto representa un ligero aumento en la proyección, que había sido evaluada en 2.3 millones.
El incremento se atribuye a la resistencia de la producción en Estados Unidos y a una demanda récord registrada en China en septiembre, alcanzando los 17.1 millones de barriles diarios.
Asimismo, se espera que el aumento de la demanda se desacelere en 2024, aunque seguirá siendo superior a las estimaciones anteriores.
Según la AIE, se prevé un aumento de 930,000 barriles diarios para el próximo año, en comparación con los 880 mil calculados inicialmente.
Esta desaceleración se atribuye a las mejoras en la eficiencia energética, el aumento de los vehículos eléctricos y la desaceleración económica.
A pesar de estos factores, las expectativas de una reducción de las tasas de interés y la disminución de los precios del crudo estimulan el consumo, y la AIE anticipa que el próximo año se alcanzará un nuevo récord de 102.9 millones de barriles diarios.
En cuanto a la oferta, la producción aumentó en octubre a 102 millones de barriles diarios, impulsada por el aumento en la producción en Estados Unidos y Brasil.
Esta situación contrasta con los recortes anunciados a principios de mes en Arabia Saudita y Rusia, según señaló la AIE.