En una comunicación interna de la embajada de nuestro país en Brasil, se reveló el interés de empresarios brasileños con relación a la importación de gas de Argentina.
Como se recordará, Bolivia, el país que estaba destinado a suministrar gas a toda la región y que abastece tanto a Brasil como a la Argentina, tiene problemas para extraerlo y su lugar sería ocupado por la Argentina mediante la producción de Vaca Muerta.
De acuerdo a lo que publicó el diario “La Nación”, hay empresas dispuestas a hacer obras millonarias de aquel lado de la frontera para adaptarse a la recepción del gas que proviene de Neuquén.
El 1° de febrero pasado, el director general de la empresa Transportadora Sulbrasileira de Gás (TSB) conversó por teléfono con funcionarios de la sección comercial de la Embajada en Brasil. Les dijo que empresas del centro de Rio Grande do Sul están interesadas en importar gas argentino para abastecer proyectos en esa zona. También se habló de empresas cementeras y de extracción de cal.
En este marco, Brasil espera que cuando el segundo tramo del gasoducto Néstor Kirchner llegue a San Jerónimo (en la provincia de Santa Fe), se extienda hasta Uruguaiana, para luego llegar a Porto Alegre. Esa obra, calculada en US$1000 millones, correría por parte del país carioca.