Es una instancia a la que recurrió luego de más de tres años de grandes esfuerzos para sostener la operación enfrentando múltiples dificultades tanto externas como internas.
El objetivo principal de esta acción es preservar la continuidad operativa, sostener puestos de trabajo no afectados y garantizar un trato equitativo a todos los acreedores, en función de las posibilidades reales que impone la situación actual mercado.
El concurso preventivo de acreedores se presenta así como una herramienta legal que permite reorganizar de manera ordenada la estructura y funcionamiento de la compañía.
Por disposiciones de la ley concursal, la compañía se encuentra legalmente impedida de pagar créditos de causa anterior a la fecha de presentación en concurso. La notificación a acreedores para que concurran a verificar sus créditos ante el síndico se realizará por medio de edictos en los términos y condiciones que disponga el tribunal judicial interviniente.
NRG está haciendo los esfuerzos para llegar a la mejor propuesta de pago posible a sus acreedores y priorizará su compromiso con proveedores, colaboradores y clientes que le permitirá continuar operando hasta la resolución de este proceso concursal.